Jair sobrevive a la temporada más dura y extraña de su vida

La temporada de Jair Amador es difícil de explicar en pocas palabras. El zaguero portugués ha pasado de ser un descarte en verano a convertirse en titular fijo en este Real Zaragoza y de villano en la anterior jornada, aunque su error no hubiera cambiado nada, a héroe por su gol frente al Mirandés. Le quitaron el brazalete de capitán, buscaron su salida en varias ocasiones,lo convirtieron en el quinto central pero por circunstancias se quedó y está demostrando su profesionalidad con acciones decisivas.

Es una campaña muy dura a nivel personal por todo lo que he tenido que vivir, pero eso ya es el pasado

El defensa, a sus 35 años, termina contrato en verano y no será renovado, salvo giro inesperado. Sin embargo, nada ha hecho que se deje llevar. Todo lo contrario. Después de no contar apenas en la primera vuelta, el bajo nivel de sus compañeros le llevó al once y desde febrero no hay quien le mueva del equipo titular.

Su temporada ha dado un giro total y ha puesto a prueba la fortaleza mental del portugués: "Es una campaña muy dura a nivel personal por todo lo que he tenido que vivir, pero eso ya es el pasado. Hay que seguir mirando hacia adelante. Tampoco puedo machacarme. Hay que mirar para adelante y seguir trabajando. Y que nadie nos dé por muertos, vamos a luchar hasta el final".

Personalidad... sin galones

En Santander cometió un grave error en el segundo tanto, pero se rehízo de la mejor manera una semana después con un tanto que puede ser clave para lograr la permanencia. Cuajó su mejor partido del curso y demostró tener mucha personalidad, aunque ya no sea capitán. Su veteranía y experiencia son aspectos que van a ayudar mucho al Real Zaragoza. Jair se irá probablemente en verano, pero quiere hacerlo salvando al conjunto maño.