Igor Zubeldia tenía que estar esta semana encarando su partido número 300 con la Real Sociedad, ya que si todo iba normal lo iba a jugar este próximo sábado en el Reale Arena contra el Mallorca, pero la lesión que sufrió en el primer tiempo del encuentro de ayer en Las Palmas va a obligar al central de Azkotia a esperar un poco más para llegar a esa gran cifra.
Zubeldia cumplirá dentro de poco más de un mes nueve años de su debut en Primera división, el 13 de mayo de 2016 en Mestalla, en un encuentro en el que el entonces entrenador Eusebio Sacristán le dio entrada a falta de siete minutos y tuvo la suerte de que su compañero de generación Mikel Oyarzabal marcó en el 89 el gol de un triunfo que pudo celebrar, con tan sólo 18 años.
En la temporada 2016-17 continuó en el filial, con cuatro apariciones más con los mayores, siendo la posterior la de su ascenso al primer equipo, con el que disputó 31 partidos como pivote, ya que esa era la demarcación en la que venía destacando en las categorías inferiores.
Una reubicación exitosa
Fue en el curso 2019-20 y, sobre todo, en el posterior, ya con Imanol Alguacil de entrenador, en los que, al aparecer con fuerza desde el Sanse Martín Zubimendi y Ander Guevara, fue reubicado en el puesto de central, con el consiguiente debate que terminó apagando del todo con su extraordinario rendimiento. Su inteligencia y riqueza táctica le permitieron salir también ganador en ese reto de jugar algo más detrás en el campo.
El caso es que, primero de pivote y luego de central, Zubeldia ha sido siempre un futbolista muy importante en la Real, como lo demuestra que al número de partidos antes citado ha ido sumando 37, 41, 31, 34, 39, 43 y 38, ya en este curso, lo que le han colocado con 299 a sus espaldas.
El 300 estaba previsto que llegase este sábado, pero la lesión que sufrió a los 22 minutos del encuentro del domingo en Las Palmas apunta a retrasarlo unas semanas, a nada que el azkoitiarra tenga la rotura de fibras que se temía Imanol Alguacil tras el encuentro.
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