Una lesión de rodilla es la raíz del último proyecto audiovisual de Garazi Sánchez. La surfista vasca, que en 2022 ya se lanzó a la gran pantalla para estrenarse con 'Vergüenza', repite tres años después con 'Modo avión', un experimento que ella misma define como "una reflexión profunda sobre el impacto del miedo, la tecnología y la ansiedad en nuestra vida; y una invitación a detenerse, replantear la velocidad en la que vivimos y a comprender que la verdadera recuperación comienza cuando aprendemos a estar presentes".
Después del Mundial de El Salvador de 2023, donde Garazi exhibió un gran nivel y firmó una decimonovena posición que le hacía soñar con estar presente en los Juegos Olímpicos de París un año después -la primera vez en la historia que el surf era olímpico-, el cuerpo le avisó que había forzado en exceso la maquinaria. "Primero fue el tobillo, luego la rodilla... Lesiones que no eran graves, pero de las que no terminaba de recuperarme. Me perdí el Preolímpico. Recuerdo estar en Indonesia, volver al hotel y ver que mis amigas estaban clasificándose y ser incapaz de alegrarme porque yo no estaba ahí", recuerda.
Durante los Juegos Olímpicos, en los que Nadia Erostarbe, Janire González y Andy Criere representaron a España en Tahití, Garazi decidió poner tierra de por medio e instalarse en México. "Recuerdo estar en aquel pueblo y no tener cobertura, pero diez años después todo había cambiado un poco... o demasiado. Era imposible no estar al tanto de lo que ocurría, meterme en las redes sociales, autocastigarme. Mi cuerpo estaba allí, pero mi mente era incapaz de conectar con el entorno", sentencia.
Experiencia vital
Garazi, que en 2018 ya había pasado por un duro proceso de recuperación al sufrir un accidente que la pudo dejar paralítica, volvió a tener que lidiar con fantasmas del pasado. "En su día me ayudó mucho pensar sólo en el presente, marcarme pequeñas metas y retos que poder ir superando, sentirme mejor que el día anterior. Sin embargo, aquí entré en un bucle, veía todo negro y el miedo y la ansiedad se apoderaron de mí. Pensaba que mi cuerpo no iba a responder, que no volvería a ser competitiva, me agobiaba el qué hacer si dejaba de ser surfista profesional...", rememora.
La surfista vasca tenía que salir de aquel túnel oscuro, pero, ¿cómo? Ella misma encontró la solución: apagar el móvil durante 15 días. "Llamé a mi madre para decirle que iba a desconectar el teléfono [podían localizarla a través de un compañero] y se me ocurrió la idea de grabarme para ver mi reacción. En aquel momento me sentí más alegre, más presente, más humana. Hablaba mejor a los demás y, sobre todo, a mí misma. Hasta dejé de tener bruxismo. Cuando ahora veo las imágenes me identifico con esa Garazi feliz", asevera quien, en ese tramo final del viaje, pudo disfrutar de los oriundos, la naturaleza y su gran pasión: el surf.
Proyecto 360º
Aquel experimento de 16 minutos de duración -"No me gusta llamarlo documental porque, aunque yo lo he grabado, guionizado y producido, me considero una surfista", justifica entre risas- se estrenará en sociedad el próximo 7 de abril y tiene como fin concienciar del impacto de la tecnología en la salud física y mental. "El deportista tiene que darse cuenta que cuerpo y mente están conectados. Que tan importante es cómo se entrena a cómo se descansa, en el entorno en el que te mueves, lo estresado o influenciado por lo que digan terceros que puedas estar... Creo que las redes sociales no son malas, pero hay que saber usarlas; y tampoco se puede vivir en una burbuja al margen de la realidad, pero sí que puedes adecuar tus hábitos a una manera de vivir más saludable. Aprovechar tu tiempo viviéndolo", subraya.
Al margen de la pieza audiovisual, el proyecto 'Modo avión' se complementa con cinco charlas con cinco expertos -Ana Ibáñez (neurocientífica), Endika Montiel (coach de salud), Jesús Matós (psicólogo), Jon Kareaga (influencer activista) y Begoña Alday (influencer aventurera)- que serán publicadas cada dos semanas a modo de Podcast para intentar explicar de manera científica esos cambios experimentados por Garazi y ayuden a entender la gestión del impacto de las redes sociales en la salud y cómo usarlas de manera sana.
Próxima parada: Los Ángeles 2028
Después de su vivencia en México, la guechotarra cambió ciertos hábitos en su día a día. "Aunque suelo viajar mucho, he fijado en Canarias una segunda residencia. Vivo en un pueblo que apenas tiene tres restaurantes, donde amanezco cuando el sol me despierta y voy andando descalza a por un café", cuenta. "Me gusta relacionarme con la gente, socializar, pero también necesito tiempo y espacio para mí; cuando quedo con mis amigas están 'prohibidos' los móviles encima de la mesa, lo importante es la conversación; tengo una aplicación que no me deja entrar en Instagram o WhatsApp en el tiempo que estoy entrenando o recuperando; ...", cita como ejemplos.
A nivel deportivo, Garazi afronta el último tramo de recuperación de la lesión de la rodilla y espera volver a la competición este verano... con la mente puesta en los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028. "No tengo prisa. Sé que es una carrera a largo plazo y me gustaría surfearla sin presión. Quiero regalarme este ciclo, seleccionar bien dónde compito y cuando descanso. Espero que cuando desconecte el modo avión pueda surfear mejor que nunca", finiquita.
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