La alegría de Luis Enrique era inmensa después de lograr la clasificación para su segunda final de la Champions como entrenador, diez años después de la conquistada con el Barça en Berlín. El asturiano, que la temporada pasada ya con el PSG se quedó a las puertas tras ser eliminado contra el Borussia Dortmund, volverá a Alemania, como en el 2015, pero ahora a Munich, para jugar una final y, además, de nuevo, contra un rival italiano (entonces fue contra el Juventus).
“Tengo un cúmulo de sentimientos positivos”, comenzó su discurso el asturiano, que salió del vestuario más de una hora después de la conclusión del partido. “¡Arteta casi me asesina! -clamó- ha llevado el partido a donde quería, con balón nos han conseguido estirar y hemos jugado un partido que no queríamos”, resumió sobre lo visto, aunque matizó que su equipo había estado “agresivo y hemos generado contragolpes para haber conseguido más de un gol en el primer tiempo”.
Sobre la Champions League que ha disputados su equipo, Luis Enrique aseguró que el camino había sido “muy duro, tortuoso.
Tuvimos el peor calendario, pero eso nos ha hecho crecer y mejorar. El equipo ha creído en sí mismo y ha ido superando cosas. Este es un proyecto apasionante. El peor momento fue contra el City, que perdíamos 2-0 en el descanso y no lo merecíamos. Las estadísticas decían que éramos uno de los mejores de Europa y se ha demostrado”, resumió.
También se refirió al Barça, al asegurar que le había “dolido que no esté en la final. Ha hecho seis goles y ha quedado eliminado. Ha mostrado un estilo que le caracteriza y creo que merecían estar en la final. Para mí jugar una final contra el Barça habría sido lo peor”, dijo en referencia a su pasado azulgrana.
Uno de sus jugadores, Achraf Hakimi, no tuvo reparos para calificar al asturiano de genio. “Luis Enrique ha hecho un trabajo increíble desde que llegó al PSG. Creó un gran equipo. Hay mucho trabajo detrás de todo esto. Él es un genio. Esta final fue nuestra motivación”, explicó.
El capitán del PSG, Marquinhos, se mostró “emocionado” por la clasificación de su equipo para la final de la Liga de Campeones, pero señaló que “esto no ha terminado”.
“Es una gran emoción, hemos hecho un gran trabajo”, dijo el defensor brasileño a la televisión oficial del partido. “El camino ha sido muy duro, lento, hemos tenido partidos muy difíciles”, recordó.
“Ahora tenemos que disfrutar de esto y preparar el partido que resta de la mejor manera. El camino a la final está completado, pero esto no ha terminado”, indicó. “La experiencia, las cicatrices te hacen crecer”, aseguró el capitán, que dijo que ha hablado mucho con los más jóvenes del equipo para “trasmitirles esta mentalidad, este ADN”.
“Trabajamos paso a paso. Comenzamos esta competición con la ambición de llegar lejos. Estamos en la final. Ya he perdido una y sé cuánto duele. Voy a intentar trasmitir esta experiencia a mis compañeros”, agregó.
Mikel Arteta, entrenador del Arsenal, se mostró muy dolido por la eliminación de su equipo. “Esto no va de méritos sino de lo que pasa en las áreas. Mi equipo ha mostrado calidad y personalidad. El mejor jugador de los dos partidos ha sido su portero, les ha ganado la eliminatoria. Estoy triste pero a la vez orgulloso”, lamentó.
